El líder y candidato de Gana Perú, Ollanta Humala se movilizó junto a cientos de nacionalistas, en el balneario de Ancón, para hacer llegar su mensaje de respaldo a los pescadores artesanales y a las familias que viven en el lugar, quienes se oponen a la construcción del Puerto de Ancón que se pretende conceder a la mafia chilena, porque aseguran que contaminará las playas y cambiará toda la dinámica comercial y residencial de la zona.
En una concentración organizada por los vecinos de Ancón, el líder nacionalista propuso que en un gobierno nacionalista se desarrollará el balneario, resguardando el trabajo de los pescadores artesanales e impulsando el valor turístico y deportivo del distrito. Los vecinos denunciaron que la eventual construcción del proyecto provocaría una alteración de la calidad del aire debido a la concentración de gases contaminantes y alertaron del daño que causarían al mar los efluentes de las embarcaciones que lleguen al puerto.
“De niños, mis hermanos y yo veníamos al balneario y nos sentíamos en casa, hoy no podemos permitir que se maltrate a quienes viven y trabajan aquí. No se puede tocar el puerto de Ancón porque es un puerto histórico”, dijo al recordar la firma del Tratado de Ancón que entregó definitivamente Tarapacá a los chilenos. “No podemos permitir que ahora el puerto también les sea entregado”, señaló.
El Terminal Portuario en Ancón (TPA), es un proyecto de Santa Sofía Puertos S.A., empresa del Grupo Romero y a decir de los pobladores y del frente de defensa de la bahía, intervienen también capitales chilenos.
Ollanta Humala recorrió el balneario en una lancha junto a pescadores y autoridades de Ancón, seguido de otras embarcaciones. Cerca de la orilla, recibió el saludo de cientos de bañistas que intentaban nadar mar adentro para acercarse al bote que conducía al líder nacionalista, quien agradeció las muestras de cariño de los veraneantes.
Wikileaks y García
En otro momento de su intervención Ollanta se refirió a la aparición de un wikileaks, publicado por el diario El Comercio, en el cual la embajada de Estados Unidos advierte una supuesta reunión para perjudicar el desarrollo de la Cumbre de la ALC-UE, desarrollada en nuestro país.
“Esas informaciones siempre serán la versión de la embajada de Estados Unidos y yo he recibido las disculpas del caso de la embajadora estadounidense. Niego tajantemente esta información porque en el marco del desarrollo de la ALC-UE nosotros nos preocupamos por organizar reuniones con todos los embajadores de los países miembros de la ALC-UE y les explicamos nuestra posición. Y esas actividades fueron difundidas en los medios”, señaló.
Agregó, sin embargo, que lo más preocupante es la información dada por el mismo diario, en el que se señala que en el 2006, el entonces candidato Alan García y Jorge Del Castillo habrían solicitado la intervención de la embajada de EEUU para promover un frente contra la candidatura de Ollanta Humala Tasso.
“Fueron los que ahora están en este gobierno los que buscaron la intervención extranjera y no nosotros. Ellos se encargaron de atemorizar a la población diciendo que nosotros permitiríamos una injerencia y hoy es la versión de la embajada la que confirma que ellos pidieron la intervención de EEUU en las elecciones”, denunció.
Eso, junto a la denuncia contra García Pérez acerca de la recepción de dinero de la familia Sánchez Paredes en la época de campaña del 2006, llevó al líder nacionalista a considerar que lo que el Presidente de la República debía hacer, en lugar de devolver el dinero como anunció, era devolver el voto a los millones de peruanos que no sólo fueron engañados en la campaña, sino que fueron traicionados por el incumplimiento de sus promesas, como la eliminación de las services, la aplicación del impuesto a las sobreganancias mineras, entre otras
“De niños, mis hermanos y yo veníamos al balneario y nos sentíamos en casa, hoy no podemos permitir que se maltrate a quienes viven y trabajan aquí. No se puede tocar el puerto de Ancón porque es un puerto histórico”, dijo al recordar la firma del Tratado de Ancón que entregó definitivamente Tarapacá a los chilenos. “No podemos permitir que ahora el puerto también les sea entregado”, señaló.
El Terminal Portuario en Ancón (TPA), es un proyecto de Santa Sofía Puertos S.A., empresa del Grupo Romero y a decir de los pobladores y del frente de defensa de la bahía, intervienen también capitales chilenos.
Ollanta Humala recorrió el balneario en una lancha junto a pescadores y autoridades de Ancón, seguido de otras embarcaciones. Cerca de la orilla, recibió el saludo de cientos de bañistas que intentaban nadar mar adentro para acercarse al bote que conducía al líder nacionalista, quien agradeció las muestras de cariño de los veraneantes.
Wikileaks y García
En otro momento de su intervención Ollanta se refirió a la aparición de un wikileaks, publicado por el diario El Comercio, en el cual la embajada de Estados Unidos advierte una supuesta reunión para perjudicar el desarrollo de la Cumbre de la ALC-UE, desarrollada en nuestro país.
“Esas informaciones siempre serán la versión de la embajada de Estados Unidos y yo he recibido las disculpas del caso de la embajadora estadounidense. Niego tajantemente esta información porque en el marco del desarrollo de la ALC-UE nosotros nos preocupamos por organizar reuniones con todos los embajadores de los países miembros de la ALC-UE y les explicamos nuestra posición. Y esas actividades fueron difundidas en los medios”, señaló.
Agregó, sin embargo, que lo más preocupante es la información dada por el mismo diario, en el que se señala que en el 2006, el entonces candidato Alan García y Jorge Del Castillo habrían solicitado la intervención de la embajada de EEUU para promover un frente contra la candidatura de Ollanta Humala Tasso.
“Fueron los que ahora están en este gobierno los que buscaron la intervención extranjera y no nosotros. Ellos se encargaron de atemorizar a la población diciendo que nosotros permitiríamos una injerencia y hoy es la versión de la embajada la que confirma que ellos pidieron la intervención de EEUU en las elecciones”, denunció.
Eso, junto a la denuncia contra García Pérez acerca de la recepción de dinero de la familia Sánchez Paredes en la época de campaña del 2006, llevó al líder nacionalista a considerar que lo que el Presidente de la República debía hacer, en lugar de devolver el dinero como anunció, era devolver el voto a los millones de peruanos que no sólo fueron engañados en la campaña, sino que fueron traicionados por el incumplimiento de sus promesas, como la eliminación de las services, la aplicación del impuesto a las sobreganancias mineras, entre otras
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