Un amor no correspondido
31 de enero de 2012 | 04:23 p.m.
Adrián Apaza - web@epensa.com.pe
En su visión geopolítica Chile ha priorizado su relación con Ecuador para atenazar al Perú. Su amor a Ecuador nace de la “necesidad” de cercar al Perú y tener en jaque la frontera norte, mientras ellos se encargan del sur.
La intensidad de su relación con nuestros vecinos del norte ha sido directamente proporcional a la necesidad de “ajustar” al Perú o utilizar a Ecuador abiertamente para sus fines.
LA HAYA LO ACERCA A ECUADOR
En la medida que el Perú ha ido construyendo el camino a La Haya, Chile ha ido intensificando su relación con Ecuador. El objetivo era claro: que Ecuador participe en La Haya reafirmando que ya existe Tratado de Límites entre los tres países (¿?).
REVIVIR EL MECANISMO DE CONSULTAS POLÍTICAS
El Mecanismo de Consultas Políticas entre Chile y Ecuador tuvo seis reuniones entre abril de 1990 y mayo de 2004. Luego se congeló. Apenas abierta la sospecha que el Perú caminaría hacia La Haya para resolver el diferendo marítimo, Chile se preocupó en revivir dicho mecanismo y así se realiza la VII reunión en Santiago el 10 de mayo de 2007.
BACHELET: LA PRIORIDAD ES ECUADOR
El canciller chileno, Alejandro Foxley, en esa reunión dijo que por orden de la presidenta Michelle Bachelet, su ministerio dará una “altísima primera prioridad a la relación con Ecuador”. La línea se había trazado. Chile necesitaba el apoyo de Ecuador para enfrentar a Perú en La Haya.
PLENA VIGENCIA DE LO VIGENTE
Ambos gobiernos, con motivo de esa reunión, emitieron una Declaración Conjunta que decía: “reafirmaron la plena vigencia de… la Declaración sobre Zona Marítima de 1952 y el Convenio sobre Zona Especial Fronteriza Marítima de 1954. En este sentido, confirmaron su común visión frente a los temas vinculados con el derecho del mar y reiteraron su más amplia cooperación en esta materia.”. Anotemos que ninguno de los países firmantes lo había objetado.
“PLENA VIGENCIA” NO ES TRATADO DE LÍMITES
De allí para adelante la clase política chilena le va a decir a su población que Ecuador y Chile “reafirman que los acuerdos de 1952 y 1954 son de límites”. Es decir le mienten. Ecuador suscribe el documento, porque no se contrapone a ninguno de sus intereses. Simplemente reafirma lo que ya está firmado y que no lo objeta ni siquiera el Perú, pero Chile le da una lectura antojadiza y arbitraria para su población.
SE INTENSIFICA ACERCAMIENTO CHILENO
Chile revive su amor por Ecuador y a partir de 2007 intensificará su relación con nuestros vecinos del norte. El 6 de agosto de 2007 Michelle Bachelet visita Quito y ratifica los acuerdos de mayo suscrito por los ministros de relaciones exteriores. En febrero de 2008 firman un Amplio Acuerdo de Asociación; en marzo Bachelet y Correa firman un acuerdo que profundiza la relación bilateral y este desea la “mejor de las suertes” a Chile en La Haya. Esto es presentado como un respaldo a la posición chilena. En mayo el ministro de Defensa de Chile y sus altos mandos militares visitan Ecuador.
MÁS ENAMORAMIENTO
En agosto del 2008 se realiza en Quito la VIII Reunión del Mecanismo de Consultas Políticas. En febrero de 2009 el canciller de Ecuador, Fander Falconí, se reúne con el Ministro (S) de Relaciones Exteriores, Alberto van Klaveren. En abril Bachelet desayuna con el presidente de Ecuador, Rafael Correa. En mayo de 2009 la cancillería chilena celebra que Ecuador dio beneplácito al nombramiento de su embajador Juan Pablo Lira. Ese mismo mes publican una nota de prensa donde señalan que los cancilleres de Chile y de Ecuador afirman que los Tratados de 1952 y 1954 son de límites.
UNA NUEVA JUGADA PARA LA TRIBUNA
La presión de Chile sobre funcionarios ecuatorianos parecía funcionar. Mientras el presidente Correa se mantenía cauto y parco en el partido que Chile jugaba en La haya, la presión sobre otros niveles de su gobierno arrancaba declaraciones que Chile interpretaba antojadizamente y las difundía como logros a su favor. El 18 de mayo del 2009 el canciller ecuatoriano, Fander Falconí, afirmó que los Acuerdos de 1952 y 1954 son “válidos y vigentes” y que “para nosotros son Tratados de Límites”. Chile festeja y su canciller, Mariano Fernández, dice que le está ganado al Perú por dos a uno. Lo que Chile nunca ha querido ver es que las declaraciones de los representantes de Ecuador siempre han estado referidas a la relación Ecuador-Perú no a la relación Perú-Chile, como quedará demostrado finalmente. Para Ecuador los acuerdos de Santiago si establecen límites para “la zona marítima” de las islas o “grupos de islas”.
ARDOROSA PRESIÓN
Entre mayo de 2009 y mayo de 2011 se dio una intensa relación por parte de Chile. Más de tres referencias mensuales en el portal de su cancillería así lo demuestran: en septiembre de 2009 se realizaría el Consejo Interministerial Chile-Ecuador y en noviembre sostiene reuniones de trabajo con formadores de opinión de Ecuador.
El año 2010 ha sido particularmente intenso en esa relación. En abril ya se desarrollaban reuniones de trabajo entre ambas cancillerías; en junio se realiza una sesión de la Cámara de Diputados de Chile para ver el tema de La Haya con presencia del embajador chileno en Ecuador, en julio el canciller chileno, Alfredo Moreno, viaja a Quito y se reúne con su par ecuatoriano; en Agosto Moreno y Piñera participan de una visita oficial a Ecuador, donde se firma una nueva Declaración Conjunta que en su punto tres remarcan su coincidencia frente a la Declaración de Santiago de 1952 y del Convenio sobre Zona Especial Fronteriza Marítima de 1954. La visita de Moreno y Piñera a Ecuador se repetirá en el mes de octubre y cierran su actividad anual con la firma, en el mes de noviembre, de un acuerdo para desarrollar actividades logísticas y científicas en la Antártida. Veinte notas de prensa de la cancillería chilena en este año se encargan de dar relieve a su relación con Ecuador.
CERCA DEL DESENCANTO
El último hecho importante en las relaciones Ecuador- Chile se da en febrero de 2011 con la visita del presidente Correa a Santiago. Ese año era decisivo para el proceso en La Haya. Perú había presentado la Réplica a la Contramemoria de Chile y en julio Chile debía cerrar el proceso escrito presentando su Réplica.
Chile trabajaba para que Ecuador sea parte del proceso en La Haya y sirva de soporte a su tesis de que los Acuerdos de 1952 y 1954 eran de límites y no acuerdos de pesca como lo sostenía el Perú. Chile se juega las últimas cartas en este camino y vendía para su tribuna la idea que Ecuador lo apoyaba. Pero la verdad era otra. Ecuador caminaba a firmar un Tratado de Límites con Perú, consciente que los criterios de límites para el mar de las islas o grupos de islas, tampoco tenía el soporte legal que correspondía a un Tratado, a pesar de las reiteradas afirmaciones de Perú de respetar los criterios.
DECISIÓN ECUATORIANA…FRUSTRACIÓN CHILENA
Ecuador toma la decisión de no ser parte del proceso en La Haya y en salvaguarda de sus intereses definir jurídicamente su límite marítimo con el Perú. A Chile se le cae el soporte principal con el que esperaba contar. El desamor estaba a la vista. Tanto enamorar para quedar desairado.
VESTIDA Y ALBOROTADA
Chile queda vestida y alborotada a dos meses de la presentación de su Réplica. El 2 de mayo de 2011 Ecuador firma un Tratado de Límites con el Perú a través del intercambio de Notas de igual contenido que deja fuera de toda duda que los Acuerdos de Santiago no eran Tratados de Límites. La declaración de la cancillería chilena y del presidente Piñera evidencian desconcierto, desencanto y frustración frente a los resultados de una política internacional que pretendió ver negro donde era blanco, y ver Tratados de Límites donde sólo habían acuerdos pesqueros.
Su tribuna sigue, sin embargo, oyendo los cantos de sirenas de quienes conducen su política exterior y se negaron a un acuerdo bilateral razonable, justo y equitativo y ahora enfrentan, arrinconados y sin compañía, el proceso en La Haya.
Por: Jesús Suarez Berenguela
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